
Liderar hoy es diez veces más difícil que hace diez años y sin duda, liderar hoy es diez veces más fácil de lo que será hacerlo dentro de diez años.
¿Qué ha pasado?
Una transformación social y de valores, un cambio en las prioridades y en la conceptualización del trabajo, un cambio generacional… Además, toca liderar en situaciones cada vez más complejas y cambiantes, con equipos multidisciplinares y muchas veces deslocalizados.
Los trabajos en general, necesitan de menos presencialismo y a la vez de más compromiso de las personas y el compromiso no se compra no se vende, simplemente se gana., se merece.
Ante esta situación, podemos criticar lo que vemos, podemos enfadarnos con esta nueva realidad, incluso desmotivarnos, pero también tenemos entre las alternativas posibles, prepararnos y dotarnos de herramientas para gestionar mejor estas situaciones porque por difícil que sea, liderar sigue siendo necesario e importante. Un arte en si mismo.